María Montessori
Para los que no la conozcan, fue una educadora italiana (también médica y antropóloga) que desarrolló su actividad profesional a finales del siglo XIX y principios del siglo XX. Durante más de 50 años observó el desarrollo del aprendizaje en niños y elaboró su propia filosofía educacional donde la autonomía prima por encima de todo.
Este sistema de aprendizaje sensorial elaborado por Montessori se basa en cuatro pilares fundamentales:
Mente absorbente
En este sentido, la educadora italiana defendía la capacidad innata de los más pequeñosde «absorber» los conocimientos como una esponja para el desarrollo efectivo de ciertas habilidades.
Periodos sensibles
Este aprendizaje se desarrolla en varias fases o «periodos sensibles» en los que los bebés son propensos a adquirir unas u otras habilidades. Sin embargo, es importante remarcar que cada niño tiene su propio ritmo y ninguno sigue una pauta estricta.
Entorno controlado/preparado
Para poder explotar el potencial innato del bebé, los padres han de procurar un entorno de aprendizaje con la mayor cantidad de posibilidades para su exploración.
Papel del adulto como guía/observador
El adulto NUNCA ha de forzar al bebé/niño a realizar una tarea. Su papel de guía consiste en ofrecerle el mayor número de posibilidades para estimular su autonomía y capacidad de decisión.
Llegados a este punto algún padre podría plantearse, ¿no es un poco inseguro? La respuesta es no. Como hablábamos antes, el papel de los padres es de mero observadores, pero su misión ante todo es facilitarle un entorno seguro y lleno de posibilidades. En este sentido, el bebé ha de explorar nuevas formas, texturas, sabores y olores para conformar su propia noción de realidad.
Montessori y motricidad
Siguiendo este método, el niño desarrollará su motricidad de forma autónoma, aportándole confianza y seguridad en sí mismo. Dará rienda suelta a sus habilidades a través de diferentes juegos con colores, formas o texturas distintos.
Montessori y alimentación
La aplicación de la filosofía Montessori a la alimentación no es más que dejar que tu bebé experimente y sea él quien decida qué se mete a la boca y qué no, a modo de juego. El movimiento Baby-Led Weaning (Alimentación Complementaria a Demanda) consiste en la introducción de comida sólida a partir de los 6 meses (siempre y cuando el pequeño se mantenga erguido, sienta interés por la comida y haya eliminado el reflejo de extrusión). De esta forma, el bebé será capaz de reconocer texturas, sabores, olores, etc.
La introducción de los alimentos sólidos ha de ser gradual y al principio en tiras o trozos que puedan agarrar con facilidad.
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