Hay estudios que señalan que los niños que leen más son los que mejor notas sacan en el colegio. Además de eso, muchos padres tratan de desarrollar simplemente el gusto por la lectura. La apetencia por las palabras depende de cada niño y es muy variable. Cada uno tendrá su ritmo y dependerá en gran parte de su curiosidad. No hay trucos infalibles para conseguir que leer sea una de sus aficiones pero hay pautas que pueden despertar el interés por este hábito.
Desde pequeños, las letras
Desde muy temprana edad, en la escuela van a comenzar a trabajar con las letras y los fonemas, juntándolas, construyendo silabas. Si en casa también tienen la posibilidad de trabajar con ellas, reforzaremos el aprendizaje realizado. Puedes encontrar en las jugueterías muchos juegos de letras que te permitan hacerlo, incluso puedes encontrar en Internet recortables para prepararlos en casa.
Dale ejemplo
Como cualquier buen hábito, es más fácil que sea adquirido si lo ve en casa como algo cotidiano. Que tus hijos te vean leer les puede animar a hacer ellos lo mismo.
Lee con tus hijos
Permite que el momento de la lectura sea un tiempo de disfrute y sintonía para los dos. Tómate tu tiempo y apaga el móvil y otros elementos que puedan romper el encanto del momento o simplemente distraer tu atención.
Adaptados a cada etapa
Desde libros acuáticos, táctiles, sonoros, etc. Puedes encontrar un libro adecuado casi para cualquier edad y momento evolutivo de tu pequeño.
Responde a sus preguntas mediante la lectura
El conocimiento se encuentra en los libros. Si tu hijo mayor te pregunta, por ejemplo, de dónde ha venido su hermanito, podéis buscar la respuesta en los libros. Los hay que explican todo de manera muy adaptada.